Primero que nada pedirles una disculpa
ya que la semana pasada no publiqué esta parte
he estado muy ocupado con otras cosas que no me daban tiempo para el Blog
igual quería cumplirles esta semana
por eso aproveché un tiempo libre para publicar
Sin más explicaciones les dejó la parte 15 de este emocionante misterio
- Es la camioneta
negra.
Tomé las llaves y
estaba por subirme a la camioneta cuando Francis me pidió que esperará un
momento; me detuve y Francis sacó un maletín, al abrirlo había una Smith &
Wesson, un revolver un poco grande, al mirar la caja de munición que estaba
junto a este entendí porqué del tamaño, eran balas .357, una magnum, un poco
parecida a mi revolver, pero esta tenia más retroceso y por consiguiente es más
poderosa, claro que esto antes que nada es complicado para mí, ya que no estaba
acostumbrado a usar armas de tanto calibre; esperaba no tener que usarla.
Además, Francis, me entregó un celular, no era tan moderno como el que tenía,
pero Francis me dejó claro que podía recibir y hacer llamadas con este equipo,
le agradecí y proseguí a subirme a la camioneta.
- ¿No va a despedirse
de la señorita Elisa? – preguntó Francis antes de que cerrara la puerta de la
camioneta
- No, la verdad no
sé contra que me enfrento y es posible que no vuelva, en ese caso no quiero
darle falsas esperanzas a Elisa, y sé que ella me pedirá que vuelva, sería muy
triste si le digo que volveré y ella se queda esperándome mientras yo esté
muerto o peor…
Cerré la puerta de
la camioneta con cierta tristeza y me marché.
Lo primero que hice
fue llamar a mi compañero en la ciudad, el me contesto nervioso.
- ¿Dónde estás? Hace
horas que he tratado de localizarte
- No me lo creerías,
pero creo que estoy cerca de resolver el caso
- No tanto por el
caso, tienes una orden de captura emitida por el comisario de ese pueblo,
supuestamente eres sospechoso en la muerte de varias personas allí
- ¿Sospechoso?
- Sí, llevaron la
denuncia hasta acá por si volvías a la ciudad, obviamente el capitán me hizo
muchas preguntas ya que conocen de nuestra amistad.
¿Amistad? No creo
que el y yo seamos amigos, lo digo porque solamente soy un contacto para el
cuando necesita ayuda y lo mismo el para mí, nunca hemos ido realmente por
planes de amigos, además después de la información mía que le entrego a numero
uno no estaba muy de acuerdo con decirle “amigo”
- Mira, si me buscan
es porque estoy cerca de algo grande, así que te pido que mantengas mi paradero
como desconocido, por lo menos hasta que te vuelva a llamar desde este número, estoy
usando un equipo antiguo, pero puedo enviarte mi ubicación, cuando lo haga
quiero que llegues con buenos refuerzos lo más pronto que puedas.
- Sabes lo lejos que
esta ese pueblo ¿no?
Había olvidado ese
detalle. Pensé rápido en una solución a eso
- Diles que sabes
donde estoy, si es verdad que maté tantas personas dirán que estoy armado y soy
peligroso, de esa forma no tiene nada que hacer el comisario de este pueblo en
eso, esto con el fin de que te el apoyo este cerca cuando lo necesite.
- ¿No estas en el pueblo?
¿Dónde estás acaso?
Detuve la camioneta,
en un paramo y miré hacía una granja que se encontraba a unos cincuenta metros
de mí, era inmensa y tenia unas cuantas personas vestidas como numero treinta y
seis, y numero veintisiete.
- Voy a estar en una
granja cerca del pueblo y creo que en esta granja están algunos de los
desaparecidos, o por lo menos los que no han sacrificado…
Corte la llamada, esperaba tener refuerzos dentro de unas
horas, igual trataría de entrar cuando llegara la noche, así que lo que seguía era
esperar a que la oscuridad me ayude para buscar a los desaparecidos y lograr
encontrar alguna pista sobre la hija de Howard… la verdad esperaba que ella
como Alisa se encontraran allí, tenía un sentimiento entre miedo y ansias de
que todo esto terminara de una vez por todas.